Santiago, 27 de marzo de 2014.- La Subsecretaria de Economía, Katia Trusich, y el Director Nacional del Instituto Nacional de Propiedad Industrial (INAPI), Maximiliano Santa Cruz, entregaron esta mañana la Indicación Geográfica (I.G.) a los Dulces de La Ligua. El reconocimiento se efectuó en el marco de la inauguración del stand “Sello de Origen” del organismo dependiente del ministerio de Economía, instalado en el Encuentro Internacional de la Industria Gastronómica y Alimentaria, EIIGA 2014.
“Contar con esta nueva denominación les va a permitir a los productores tener un sello de origen que contribuirá a promover a lo largo de Chile sus productos, en función de un territorio, lo que releva a los dulces y a toda una comunidad”, afirmó la subsecretaria. Además, destacó el trabajo la importancia de la organización y el trabajo que realizaron los dulceros. “Como Ministerio de Economía estamos decididos a apoyar y fomentar la asociatividad como una manera de impulsar a los emprendedores”, precisó.
En tanto, Maximiliano Santa Cruz, Director Nacional de INAPI, manifestó su orgulloso por inaugurar el stand del Sello de Origen, en EIIGA 2014, pues “nos brinda la oportunidad de exhibir nuestros productos tradicionales en una vitrina inmejorable”.
Mientras David Plaza, Presidente de la Asociación Gremial Dulces de La Ligua, aseguró que el sello de origen es “una validación de nuestros productos, de nuestra identidad, ya que el dulce lleva el nombre de la ciudad de origen del lugar: La Ligua”.
Sello de Origen nace como una forma de reconocer y retribuir el esfuerzo de sus productores y como un medio para impulsar el desarrollo productivo de las comunidades locales de nuestro país, a través de su reconocimiento como Indicaciones Geográficas (I.G.), Denominaciones de Origen (D.O.), Marcas Colectivas y de Certificación.
Las indicaciones geográficas protegen productos originarios del país o de una región o localidad, siempre que tengan una calidad, reputación u otra característica imputable a su origen geográfico. Dulces de la Ligua cumple con estas características porque tienen una tradición centenaria y cuentan con una fuerte vinculación con su lugar de origen.