La Subsecretaria Natalia Piergentili participó en panel de expertos en el marco del Diálogo Público Privado de la Agenda Digital de la Alianza del Pacífico y habló de la importancia de la unificación de criterios y estándares para el trabajo que llevan a cabo los países
“La Alianza del Pacífico nos permite generar un diálogo que tiene ciertos criterios mínimos, a la hora de plantearnos el desafío de la Economía Digital como continente”, fueron parte de las palabras iniciales de la Subsecretaria de Economía y Empresas de Menor Tamaño, Natalia Piergentili, al momento de iniciar su participación en el panel de expertos del Seminario Agenda Digital de la Alianza del Pacífico, organizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales –Direcon- , que convocó a autoridades de Chile, Colombia, Perú, México, además de representantes del mundo privado.
La Subsecretaría Piergentili señaló la importancia de la colaboración público privada ya que “el Estado tiene enormes responsabilidades, pero no tiene la robustez ni la capacidad para hacerlo sólo”. En este mismo contexto agregó que “la Alianza del Pacífico nos permite generar un diálogo que tiene ciertos criterios mínimos, a la hora de plantearnos el desafío de la Economía Digital como continente”, pero señaló que es relevante que la Agenda Digital deje de ser un punto de la administración de turno, “tiene que pasar de ser una conversación de Gobiernos a una de Estados, que trascienda la temporalidad de los regímenes y se instale en la agenda de los países”.
En su exposición la autoridad económica señaló la importancia de concordar patrones imperceptibles de trabajo entre los países de la Alianza del Pacífico, (Chile, Colombia, Perú y México), “en el caso chileno, hemos recomendado al menos 14 puntos para el debate del mercado digital regional, ciberseguridad, protección de datos, plataformas digitales de bienes y servicios, instrumentos para la protección del consumidor, propiedad intelectual, protección de datos, seguridad de información, obstáculos del roaming, conectividad internacional, digitalización de la economía social y equidad de género , tecnologías en las PYMES y desarrollo de capital humano. Sabemos que existen más puntos, pero esto nos parece, como Estado de Chile, para establecer los estándares mínimos entre los países”.
AGENDA DIGITAL DE LA ALIANZA DEL PACÍFICO
En esta ocasión, el Diálogo Público-Privado Agenda Digital de la Alianza del Pacífico, es el marco para la promoción de una transformación digital, que contribuya a impulsar un desarrollo más inclusivo, que ofrezca más y mejores oportunidades para las pequeñas y medianas empresas y para los ciudadanos, que promueva la productividad y la innovación, y que se apoye en una gestión gubernamental más efectiva, eficiente y transparente.
Los gobiernos y ciudadanos son parte de esta transformación digital, y deben ser actores activos en este proceso, de lo contrario, los retrasos en la transición de la región a la economía digital pueden significar una pérdida significativa de competitividad, productividad, desarrollo y empleo.
Durante los últimos años, los gobiernos de América Latina han acelerado la adopción de las tecnologías de la información y la comunicación, (TIC), sobre todo en términos de acceso a servicios de internet. Sin embargo, las tendencias mundiales se mueven muy rápido, y es necesario entender y poner en práctica estrategias innovadoras que permitan aprovechar las oportunidades que nos brinda la tecnología para ofrecer un mejor servicio a los ciudadanos.
La digitalización favorece también la productividad de las empresas y gobiernos, generando procesos más eficientes, y ampliando la gama de productos y servicios a nuevos consumidores. En este contexto, un Mercado Digital Regional, -MDR- para los países de la Alianza del Pacífico, presenta una oportunidad para fortalecer la integración regional, permitiendo también el acceso a información y a la posibilidad de movilidad de talentos. De esta manera los ciudadanos estarán expuestos a una variedad de oportunidades laborales, como de información y contenidos, lo cual permitirá mayor flexibilidad en el intercambio de información y creando mejores oportunidades de empleo para los ciudadanos.
